Los Juegos Olímpicos que se están llevando a cabo en la ciudad de París nos han traído muchas historias de éxito en estos días de competencia, sin embargo, hay una que resalta sobre todas y se dio esta mañana durante la prueba de los 200 metros en el atletismo, siendo el estadounidense Noah Lyles el protagonista de la historia.

Esto se dio en el marco de la final de la prueba del atletismo donde estaban en disputa las medallas y donde Lyles era el favorito para llevarse la presea de oro en esta competición y que, en este caso, se llevaría medalla de bronce. Pero lo que nadie sabía es que días antes se había realizado una prueba para el Covid 19.

“Di positivo alrededor de las 5 am del martes por la mañana (…) Me desperté en mitad de la noche con mucho escalofrío dolor de garganta y molestias y esos eran muchos de los síntomas que siempre he tenido justo antes de contraer Covid, y pensé tengo que hacerme la prueba”, dijo el atleta en la zona donde se puede hablar con la prensa al finalizar la competencia.

Al momento en que el atleta supo que la prueba salió positiva salió de la Villa Olímpica y se metió al hotel más cercano para ponerse en cuarentena y empezó el tratamiento con los medicamentos que no le trajeran problema con la prueba antidoping que se les practica a los concursantes.

“Aún quería correr, dijeron que todavía era posible. Así que nos mantuvimos alejados de todo el mundo y tratamos de ir ronda por ronda. Y para ser honestos, no sabía que, si quería salir aquí y ganar, tenía que darlo todo desde el principio. No tuve tiempo para ahorrar energía”, añadió Lyles.

Tan pronto cruzó la línea de meta, haciéndolo acreedor a medalla olímpica, se dejo caer en el suelo de espaldas en la pista, para ser rodeado de entrenadores y parte del cuerpo médico de la organización de los Juegos Olímpicos, quienes lo movieron hacia una pared mientras le administraban medicamento.

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