Por Lizbeth Mora

Un incendio de gran magnitud en una bodega de madera y aserrín generó caos y preocupación la mañana de ayer en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México. El siniestro ocurrió en un local ubicado sobre avenida Chimalhuacán, en la colonia Benito Juárez, el cual también opera como salón de fiestas. Las primeras investigaciones apuntan a que un cortocircuito fue la causa del fuego que se propagó rápidamente debido a la alta combustibilidad de los materiales almacenados en el lugar.

Vecinos de la zona dieron aviso a las autoridades alrededor de las 08:00 horas al percibir las llamas y el denso humo negro que salía del inmueble. La rápida respuesta de los cuerpos de emergencia permitió controlar una situación que pudo haber tenido consecuencias más graves. Elementos del cuerpo de bomberos acudieron con nueve bombas de agua para sofocar las llamas, que no cedían ante la intensidad del fuego.

El incendio no solo generó una gran movilización de bomberos, sino también de la Policía Municipal, que acordonó la zona para evitar que curiosos o vecinos se acercaran al lugar, garantizando así la seguridad de los habitantes y permitiendo que los rescatistas realizaran su labor sin interrupciones.

Durante las labores de extinción, un bombero resultó lesionado por inhalación de gases tóxicos, lo que requirió su traslado inmediato a un hospital cercano. Según el reporte oficial, el bombero se encuentra estable y bajo supervisión médica.

En las inmediaciones del incendio, se encuentra una escuela primaria, lo que motivó a las autoridades educativas a suspender las clases para prevenir cualquier riesgo a los estudiantes y al personal docente. Los padres de familia fueron notificados a tiempo, evitando complicaciones mayores.

Aunque las llamas fueron controladas horas después, los bomberos continuaron con labores de enfriamiento para evitar que algún punto caliente reactivará el incendio. Las autoridades han señalado que se llevará a cabo una inspección detallada del inmueble para determinar las causas exactas del cortocircuito y evaluar los daños estructurales.

Este incidente ha encendido las alarmas entre los vecinos, quienes demandan mayor vigilancia y supervisión en locales comerciales que operan con materiales inflamables. Asimismo, se hace un llamado a la importancia de contar con medidas preventivas, como sistemas eléctricos revisados y planes de emergencia actualizados. A pesar del temor que generó el siniestro, la pronta acción de los cuerpos de emergencia evitó una tragedia mayor en esta zona densamente poblada.

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