La noche de ayer 17 de diciembre se llevó a cabo una nueva edición de la final del fútbol mexicano entre el conjunto del América y los Tigres que se vieron las caras en el estadio Azteca, inmueble que estará cerrado y en remodelación a partir del próximo año para dejar al también llamado Coloso de Santa Úrsula listo para el mundial que se va a desarrollar en México-Estados Unidos y Canadá.
El encuentro fue el partido de vuelta de la gran final del fútbol mexicano siendo el primer partido en la ciudad de San Nicolás de los Garza, Nuevo León, un empate a un gol en el estadio Volcán. Por lo que ambos equipos llegaban con la necesidad de marcar diferencia en el terreno de juego para poder superar al rival.
El encuentro comenzó con una propuesta agresiva por parte de los universitarios que se abalanzaron sobre la portería azulcrema, sin embargo, no lograron ponerse en ventaja a pesar de la insistencia. Pero para evitar que esto sucediera, el portero del América, Luis Ángel Malagón tuvo una intervención que fue clave para mantener el cero en su arco en la primera mitad.
Y para la parte complementaria las cosas dieron un giro de 180 grados cuando lo capitalinos salieron con todo en búsqueda de ese gol que los pudiera acercar al ansiado título 14. La tónica se mantuvo hasta el minuto 79 cuando, a cinco minutos de haber ingresado al terreno de juego, Raymundo Fulgencio, jugador del equipo regiomontano lanzó un manotazo al delantero americanista Julián Quiñones, lo que provocó la expulsión del jugador tigre y que complicó el trámite para su escuadra.
A pesar de tener un hombre de más por casi veinte minutos, lo americanistas no pudieron tomar la ventaja en los noventa minutos de juego y se tuvieron que ir al tiempo extra para determinar al campeón, siendo en estos treinta minutos de más donde pudieron clarificar el partido con un gol tempranero por parte del mismo Quiñones. Posteriormente, en un contra ataque, el portero Nahuel Guzmán se fue a los vestidores temprano por doble tarjeta amarilla al corta la acción, dejando a los Tigres con nueve jugadores en el campo, cosa que aprovecharon los de Coapa y por conducto de Richard Sánchez y de Jonathan “cabecita” Rodríguez, incrementaron el marcador a tres goles, con lo cual, se coronaron como los nuevos campeones de la Liga BBVA MX.
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